Las cosas como son

ahh dulce miel de los días...
si te tengo en las manos como espesa brea
y ya no me incomodan ni pasión ni lucha ni espera
no me resignare sólo a mirarte blanda,
escurriendo tu dulzura entre mis uñas.

Por eso, recojeré con manza nostalgia
toda la magra hermosura, todo lo que tan poco dura,
como penachos de tiempo que oficiarán de excusa
en un camino ancho de miedo, a extraviar su ruta.

Resoplar en mis manos,
sacudir en mis culpas,
elevar en mis dudas,
una obstinada rigidez de humano.
Será solo lo suficiente para pintarte como prenda digna,
botín de salidera, para excéntricos baqueanos.

Por lo que en un acto único, en el que apuntare a acertarte
en un ezfuerzo pleno, por culminar entero
y con fuego aún! sobre mis velas, me elevare en mis manos,
resoplaré en mis culpas, sacudire en mis dudas
y apuntare certero para obligarte...

Muerte!


29/05/10